letrero

martes, 28 de junio de 2011

...Las casadas estén sujetas a sus propios maridos,como al Señor.

Uno de los temas quizá que mas a dado polémicas y que se ha mal interpretado a sido el tema de la sujeción (Acción de sujetar .Unión con que una cosa está sujeta) no ha sido fácil lograr ser imparcial,pero que el Señor nos de la gracia suficiente para alentarnos en algo que es contra nuestra naturaleza carnal. Muchas dirán que eso no es así, pero déjenme decirles amadas hermanas que esto es por causa de la caída del hombre en el Edén.
             Hagamos memoria ....cuando el Señor crea al hombre y  la mujer a su imagen y semejanza los creo eran iguales, era como si Dios se hubiese vaciado en dos vasijas ,las cuales portaban  porciones de Él...y al unirse eran la plenitud de Él ,se complementaban de tal forma estos dos seres que en ellos estaba la descendencia de un pueblo con el cual Dios no solo quería habitar sino quería hacerlos portadores de su amor....si  fuera el amor de otro ser cualquiera no tendría mayor relevancia pero este era el amor del creador de todo!!!de Dios mismo...que grande y glorioso  es esto ,que Él siendo Dios creara seres  tan frágiles para derramar su amor .Pero como siempre había alguien que no soporto ver al Señor convivir con estas criaturas planeo cortar esta relación ,total él ya había perdido todo y había sido desechado por Dios .Entonces sedujo a esta criatura a través de una situación sin mucha importancia a los ojos del hombre ,pero a los ojos de Dios era algo grave lo cual derivó en la separación del hombre y la mujer con Dios, aquí se interpuso algo muy grande con lo cual Dios no podía cohabitar este era el pecado(recuerden que estamos hablando de un Dios tres veces Santo) esta desobediencia tuvo consecuencias inimaginables para esta criatura no solo corto esta hermosa relación sino que corrompió todo lo creado ,el orden de Dios fue alterado y su presencia ya no estaba con el hombre.
   Entonces Dios le dijo a la mujer:” Haré que sufras bastante  durante tus embarazos y que al tener tus hijos sientas mucho dolor .Y a pesar de eso, seguirás  deseando a tu marido, y él tendrá dominio de tí... (génesis 3:16)
  Ahora queda mas claro... cuando Él nos formo nos hizo ayuda idónea del hombre, estábamos para complementarnos, para ser uno juntos ,pero esto se corrompió con el pecado, y desde entonces hemos luchado para que el hombre no se enseñoree de nosotras .
        Pero amadas esto tiene solución, cual dirán ustedes… el Señor ya tenían un plan y este era perfecto aquí no habría equivocaciones el ya lo tenia preparado desde antes de la fundación del mundo estaba en el corazón de Dios habitar con el hombre en amor “Dios el Señor hizo túnicas de pieles de animales, y con ellas vistió al hombre y su mujer( génesis 3: 21)
  Aquí viene va tan esperada solución ...cuando el Señor viste a ambos con pieles les esta mostrando que a través de la muerte de un inocente seria cubierto su pecado alguien pagaría por ellos y Dios proveería lo necesario para esa redención ...este es nuestro Señor Jesucristo...a través de su muerte fueron cubiertos nuestros pecados la maldición fue cortada ya no estamos sujetos a los padecimientos de la carne ,por lo cual volvió todo al orden original donde el hombre y la mujer vuelven a ser sujetos de su amor donde Él se expresa en plenitud , por esto somos coherederos en cristo Jesús y hemos sido sentados en los lugares celestiales por los meritos de aquel que nos amo y se entrego por nosotros ,bendito sea el Señor .
Por  tanto ya estando en comunión con Dios, la vida del Señor se manifiesta  por que vemos a nuestros maridos representando al Señor como sacerdotes de nuestro hogar donde él ya no se enseñorea de nosotros sino que se da en amor como cristo se dio por la iglesia ,lo corrupto paso ahora la plenitud del Señor se manifiesta a través de la sujeción de ambos donde el hombre ya no se pertenece  así  mismo ni la mujer  a ella misma ,sino el uno al otro como al Señor. Y si yo conocí el amor del Señor cuando Él se vació en mi corazón podré amar y sujetarme al compañero que Dios me dio para transitar por esta vida , aquí es donde el a través del matrimonio muestra la figura de lo que será cuando todo sea transformado y el venga por nosotros .A caso no es llamativo que el primer milagro del Señor en la tierra se haya realizado en un matrimonio (las bodas de canaa) y todo termine cuando sean bien aventurados los que hayan sido invitados a las bodas del cordero, amadas las que han recibido las bendición de como decía Pablo el misterio del matrimonio.
                Gócense, alégrense han sido participe del matrimonio la gran primicia , la figura de lo que ha de ser...



por Yasfra

sábado, 18 de junio de 2011

1ºPedro 3:7

Cuando alguno es recibido con hospitalidad, suele escuchar esta fórmula de cortesía” siéntase
como en su casa”, y con esa frase se le quiere expresar que puede moverse con total libertad y
seguridad, pues tiene el derecho para hacer lo que quisiere.
A partir de esta analogía he considerado la urgencia de despertar a las mujeres, primeramente,
y a los varones, sobre la posición, condición y valor  de la manifestación de la imagen de Dios,
en su versión femenina.
Hasta tanto una mujer  no sepa lo que Dios, su Creador, dice de ella, seguirá escuchando y aún
peor , creyendo lo que los demás dicen de ella, y no podrá moverse libremente ni ejercer sus
derechos.
El bebé tiene un periodo de reconocimiento de sí mismo. Recorre, indaga  su cuerpo y
experimenta llevándose sus manos  y aun sus pies a la boca; y conoce los objetos no sólo por
medio del sentido de la vista, sino también por medio del tacto, el gusto , el olfato y el oído    
(de ahí que le agraden los sonajeros o  sacudir y golpear las cosas). Sin embargo, el momento
más significativo en su desarrollo es el de enfrentarse a su propia imagen, es decir cuando
descubre que aquél que está en el espejo es  él mismo. Al principio se refiere a sí mismo como
a “otro”, en tercerra persona, diciendo, por ejemplo “el nene”. A medida que va identificando
la imagen del espejo consigo mismo, va logrando la unificación de las dos percepciones, hasta
lograr hablar de sí en primera persona y dice “ no quiero”,” dame”,” es mío”,etc.
¿Por qué esta referencia al desarrollo evolutivo del ser humano? Porque parece que la mujer,
genéricamente  hablando, se ha quedado en la primera etapa de su proceso de
autoconocimiento. Ha buscado su reflejo en un espejo defectuoso, que distorciona su imagen,
le devuelve una falsa. Es el espejo  de la “percepción  humana”, llámese, antropología,
psicología, sociología , sexología, tradición, religión u opinión pública a secas.
El Salmo 119 nos revela:
“Tu palabra es una lámpara a mis pies;
es una luz en mi camino”( v 105)
En sus 176 versículos, ocho versículos  por cada estrofa ( y cada una presidida por una letra de
las 22 que conforman el alfabeto hebreo,”alefbeto”) se afirma, confirma y ratifica el poder
develador, corrector , restaurador, liberador y vivificador, de la palabra de Dios (vv 9 , 40, 44,
69, 107, 116, 133, 144, 159, 160, 165)
Éste es el tiempo de volver, como dice el salmo a la Palabra que es el perfecto espejo para
conocer la imagen verdadera y correcta. Sólo así el proceso cognitivo podrá completarse, pues
sólo la palabra de Dios trae luz, crea, posiciona y da propósito (Gn.1)
Cuando el apóstol  Pedro, en la primera carta, instruye a los maridos , la condición promordial
que establece  para  tener  una relación perfecta con Dios y con su esposa es vivir con
sabiduría.
“Vosotros, maridos, igualmente vivid con ellas sabiamente “( R.V. 3:7a) No hay sabiduría  que no proceda del  Omnisciente,  todos sus preceptos, estatutos y juicios
son perfectos; su ley es perfecta porque ÉL es sabio (Salmo 119).
Así , llegamos al punto en que confluyen las dos líneas discusivas: su palabra es la medida de
todas las cosas ( por ella somos y nos movemos, por ella y en ella estamos seguros, 2Cr 20:20)
y sólo es sabio el que guarda su palabra y la pone por obra.
Por mucho tiempo se ha mirado a la mujer como un ser  débil, necesitado del varón,
desprotegido o minusválido. Se sigue  escuchando la frase “sexo débil” en referencia a ella. Sin
embargo, Dios no dijo eso al tiempo de crearla. Sus primeras palabras acerca de  ella  fueron:
“ No es bueno que el hombre esté solo;
    le haré ayuda idónea para  él” (Gn 2:18)
Es decir que la mujer vino a suplir una necesidad, a completar, a destruir la soledad.
La expresión ”ezer kenegdó” que Reina / Valera traducen como “ayuda idónea” tiene un
significado mucho más amplio y profundo.
La palabra ezer hace referencia a un poder o fuerza para salvar (socorro). La palabra Kenegdó
califica  a ezer, y expresa un sentido de propósito.
“ Le haré un poder (fuerza o socorro) que sea digno de estar al lado del hombre para  que lo
esfuerce a continuar con sus propósitos, y que lo corrija  cuando se salga de éstos”
Adán no era capaz de alcanzar por sí solo todo lo que estaba llamado a ser y hacer; ella
aportaba la complementariedad necesaria e imprescindible para el trabajo diario, la
procreación, la manifestación del amor, la paternidad. La ayuda idónea es apoyo y compañía
perfecta. Otorga la oportunidad de revelar lo que está oculto.
No fue creada como ser débil sino como instrumento para la manifestación de la divinidad del
ser humano y el cumplimiento de su propósito y misión.
Si nos movemos en este nivel de revelación podemos entonces  comprender lo que el apóstol
Pedro expresó al decir:
“ dando honor a la mujer como vaso más frágil” (RV 3:7B)
Debemos destacar las palabras dando honor que en la NVI son reemplazadas por tratando con
respeto.
Es decir, que aquí no se habla de constitución o condición, ni de actitud, sino de consideración,
del tratamiento que debe recibir por parte del varón.
LA MUJER, POR CONSTITUCIÓN, NO ES MÁS DÉBIL
Su cuerpo y aun su psicología están preparados para el dolor, el sacrificio, la entrega y el riesgo
de muerte, por constitución. Su resistencia física la hace capaz de desarrollar en sí un ambiente
óptimo para la vida de otro ser humano a muy temprana edad, aun antes de haber
completado su desarrollo físico, pues a los 14 o 15 años puede dar a luz sin dificultades siendo
que hasta los 18 o 20 años, en algunos casos, puede crecer en altura y contorno de  caderas y
busto.
Desde infante se familiariza con la idea de engendrar, gestar y amamantar; en la pubertad
empieza a experimentar sus priemros cambios físicos que consecuentemente afectan su estilo de vida, Crecen las mamas ocasionando dolor e incomodidad, sus órganos internos se
empiezan a desarrollar y producen inflamaciones y diversos malestares en el vientre y las
piernas hasta que por fin aparece la menarquía o primera menstruación, la cual modifica
totalmente la relación con su mundo hasta ese momento  infantil.
A partir de allí  y por cuatro décadas, mensualmente ( meses lunares) experimetará tres días
de sangrado e incomodidad; su circulación sanguínea, su tracto digestivo, su presión arterial y
especialmente su ánimo, sufrirán alteraciones.
Si el embarazo se produce, los cambios serán más severos: naúseas, mareos, vómitos,
modificación de la posición del eje vertical, desplazamiento de los órganos abdominales,
aumento de la temperatura corporal, aumento del peso, liberación de hormonas para la
preparación del parto; separación de los huesos pélvicos y del sacro; aumento de las mamas,
incomodidad para andar, agacharse, dormir, aumento del apetito, etc,etc,etc.
Y  luego el trabajo de parto: contracciones, dilatación, parto  y alumbramiento . Sin contar con
la posibilidad de episotomía o cesárea; sin contar  con dificultades como placenta previa,
desprendimiento de placenta, y cosas similares.
Por otra parte, durante meses seguirá sacando de sí todos los nutrientes para sostener esa
nueva vida.
La mujer, por constitución, no es débil. Cada embarazo le exige a  su cuerpo  un esfuerzo
especial por dos años, pero su psiquis por mucho más, pues el estrés de cuidar esa pequeña
criatura se extenderá aun despúes de que empiece a caminar.
La  longevidad es más frecuente en la mujer que en el varón. Es más alto el número de viudas
que de viudos.
LA MUJER, POR ACTITUD, NO ES DÉBIL
Con frecuencia vemos mujeres cumpliendo su misión de madre y convertirse en jefas de hogar
y principal sostén de la familia.
La resistencia al dolor y a las enfermedades, al sacrificio de toda índole, hacen de la mujer un
ser verdaderamente fuerte.
El diseño de Dios es perfecto y se hace manifiesto  en las virtudes de Prov. 31.10 y
subsiguientes.
El versículo 10 la llama mujer virtuosa(RV) o mujer ejemplar(NVI) siendo que en hebreo
también significa mujer fuerte. A partir de esta definición el autor del libro empieza a
describirla. Lo hace a través de un acróstico, dedicando un verso a  cada letra del alfabeto
hebreo, le da honor destacando todas sus cualidades, las cuales superan ampliamente toda
medición. La mujer en propósito abunda en virtudes, es un modelo, un arquetipo de
perfección, pues es el diseño original y por lo tanto , es fuerte.
V.11 inspira confianza;
V.11-12  siempre aporta y no mengua;
v.12-13  es proactiva;
v. 12 actúa con diligencia;
v.13  genera recursos nuevos;
v.14  no se limita a su entorno;
v.14  considera nuevos  horizontes;
v.15  administra y gobierna el tiempo, (su cuerpo sabe coordinar y concordar los ciclos)
v.15 actúa con responsabilidad y justicia;
v.15 hace misericordia;
v.15 administra con equidad;
v.16 somete la tierra, la administra y gobierna
( Gn 1:28 fructificar, multiplicar, llenar y someter)
v.17  es trabajadora incansable;
v.17 es decidida;
v.17 no le teme al trabajo, ni al más esforzado;
v.18   supervisa y evalúa:
v.18  aun en las horas de descanso, vela;
v. 19   no se limita a una sola tarea o  función, es multifuncional;
v.20   tiene cuidado de los más débiles;
v. 20  es consciente del prójimo y sus necesidades
( la matrícula en carreras de asistecia social es preeminentemente femenina);
v.20  está dispuesta al servicio;
v. 20  actitud generosa y comprometida con su comunidad;                        es
naturalmente política
v.21  es previsora, porque es entendida en los tiempos;
v.21-22     asegura cobertura a su familia;
v.22  actúa procurando acciones justas, propias a la dignidad de Dios,
(Ap. 19:8);
v. 22 asume su posición de gobierno (ama de casa);
v.23  su conducta no avergüenza al marido, le da honra en su comunidad;
v.23  no es estorbo a la reputación de su marido, para gobernar al pueblo (1º
Tim. 3:5);
v.24  considera la economía doméstica pero no se limita al entorno familiar;
v. 24 es generadora de posibilidades para otros;
v. 25 muestra fortaleza, dignidad y confianza;
v.25   actitud  valiente y esperanzada;
v. 26  actitud prudente, reflexiva, sabia;
v.26  actitud docente;
v. 26  actitud amorosa;
v. 27  analiza y evalúa el estilo de vida de sus hijos
y proyecta su destino; mide las consecuencias de las decisiones;
v.27  se hace merecedora de cada bendición diaria.
Muchas mujeres exhiben algunas de estas caractérisitcas, pero la diseñada y entregada por
Dios a Adam como  ezer kenegdó, las reúne todas.
Concluimos entonces que la fragilidad a la que se refiere el Apóstol Pedro, no es debilidad. Él
habla  de trato. Dice: traten a sus esposas COMO a vaso MÁS frágil, es decir, más delicado.
La delicadeza no necesariamente  es debilidad, puede ser excelencia.
Esta bendita comparación enfrenta el término “mujer”, elemento real, al término” vaso”,
elemento evocado, el cual funciona como imagen visual y táctil. De ninguna manera lo define,
sólo lo aproxima a algunas de sus  características.
Conforme a la nobleza de la  bebida es la calidad de la copa. Pues, ya es claro que dicho
recipiente es portador de una esencia más valiosa que todas las piedras preciosas. Es la
mismísima imagen del Dios Altísimo, Creador de los  cielos  y de la Tierra, que en su inmenso
amor  le trajo al varón el único ser capaz de sostenerlo, alentarlo y amarlo en todo momento y ante cualquier circunstancia a fin de que cumpla el anhelo divino de conformar una verdadera
familia de adoradores, testimonio del Dios vivo.
El varón también es un vaso, recipiente de la imagen de ese mismo Dios de Amor y Gracia,
pero la mujer ha sido dotada de una sensibilidad distinta con el objeto de aportar ternura y
alivio cuando el varón establece reglas a fin de capacitar para el ejercicio del poder.
Es extremadamente necesario y urgente que tanto las mujeres como los varones cambien su
modo de apreciar la obra de Dios. Él no creo sexos rivales sino un ser humano, varón y mujer,
que lo represente, un equipo tan perfecto que merece se calificado de “ bueno en gran
manera” ( Gn. 1:31).
Sólo viéndonos como el Padre nos ve, a través de Jesucristo el Señor, podremos vivir en
libertad, porque sólo el que conoce la verdad es libre ( Jn 8:32) y puede hacer las obras que
Dios le encomendó para el Séptimo Día (Gn 1:28-30;Gn. 2:2-3)


Por:  Laura Arco 

como vaso fragil desde los ojos de un varon(testimonio)

Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como vaso más frágil, y como coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo” 1a. Pedro 3:7
Amados todos:
Nací en 1950, en el seno de una familia de la clase media argentina... Vale decir, en una época en la que aún se rendía tributo a la cortesía y a la formalidad. Desde niño me enseñaron que debía ser amable, considerado y caballeroso con las mujeres... Traducción: cederles el asiento en los buses; darles la prioridad en el paso; apartar y arrimar la silla cuando se sientan a la mesa; abrirles la puerta del auto; cederles el lado de la edificación cuando vais por la calle...etc.etc.etc...
Normas de urbanidad. Necesarias; pero no suficientes para configurar respeto...
Era muy joven cuando llegó a mis manos este poema/oración de Vinicius de Moraes, excelente poeta brasileño:
“...Ten piedad, Señor, de todas las mujeres.
Porque nadie más que ellas merece tanto amor y amistad.
Porque nadie más que ellas desea poesía y sinceridad.
Porque nadie más que ellas precisa tanto alegría y serenidad...”
Cuando me convertí en un hombre hecho y derecho, leí una preciosa novela corta, el “Diario de Adán y Eva” de Mark Twain, uno de mis escritores norteamericanos favoritos, junto a Walt Whitman y Ray Brandbury... 
En esta obra, Mark Twain pone en boca de Adán la siguiente descripción de Eva:
“...Si le fuera posible quedarse quieta y permanecer tranquila por lo menos dos minutos, creo que su rostro me produciría un efecto de agradable serenidad...
Estoy seguro, porque pude darme cuenta de que es una criatura deliciosa, por pequeña, por esbelta, por frágil, por redondeada, por delicada, por graciosa...
Recuerdo un día en que la vi, sobre una piedra lisa y brillante que usaba como plataforma. Blanca como el mármol, bañada por un rayo de sol, echaba hacia atrás su joven rostro y se hacía sombra sobre los ojos con la mano, para seguir el vuelo de un pájaro en el cielo...
Ese día descubrí la belleza femenina... Al principio la encontraba demasiado habladora; ahora, me sentiría desamparado si no pudiera escuchar su voz..”
Romanticismo. Deseable. Imprescindible, diría yo... Pero que de menor rango que la dignidad...
Pasó el tiempo... y conocí a una familia cristiana que oró por mi Salvación durante diez años... pero, ya sea porque yo era (o soy) demasiado duro de corazón... o porque tan solo el Señor conoce los tiempos y las sazones... recién pasado ese lapso caí como fruta madura en su brazos amorosos...
Y fue a partir de este punto que su Palabra comenzó a darle verdadero sentido a todo aquello que había “aprendido”... entre ellas mi actitud hacia las mujeres...
Y por fin llegué a 1a. Pedro 3:7, donde el inefable apóstol nos advierte, a nosotros, los hombres, la forma en que Dios dispone que tratemos a nuestras compañeras...
Tan solo se trata de un versículo, pero lleno de prácticas recomendaciones a los maridos acerca de la convivencia... y que a continuación trataremos de analizar...
El “igualmente” con que comienza el versículo nos indica que ambos integrantes de la pareja tienen obligaciones para con su compañero/a... aunque ello no implica que el carácter de las obligaciones sea idéntico para uno y otra...
Hombre y Mujer deben comportarse, respecto de la pareja, como un “equipo”... y el éxito del matrimonio depende de que cada uno cumpla con su función... y que lo haga conforme a lo que Dios prescribe en cada caso...
Y estas obligaciones son distintas porque distinta es la idiosincrasia, naturaleza, características... de hombre y mujer...
Sinceramente pienso que uno de los males de nuestro tiempo es el querer equiparar a toda costa al hombre y la mujer, al punto que vemos con preocupación como en nuestra sociedad actual muchos hombres se han “feminizado” y muchas mujeres se han “masculinizado”... no estoy hablando de preferencias sexuales... sino más bien de roles sociales,  laborales, familiares,  que cada vez se confunden más y más...  Y en esta confusión ambos han perdido: Hombre y Mujer...
Tan solo hacer las cosas a la manera de Dios garantiza el éxito... Así hemos sido diseñados...
Pedro nos insta a vivir, a cohabitar, con nuestras esposas “sabiamente”, el vocablo griego utilizado en la Biblia es “katá gnosim” que significa: según conocimiento... lo que implica no sólo el considerar el particular carácter de la mujer... sino el pedir “sabiduría de lo alto”... es decir, el tipo de conocimiento y discernimiento que tan solo el Señor nos puede dar... En otras palabras... no podemos pretender relacionarnos con nuestra compañera tan solo desde nuestra humana sabiduría, sin la luz que El aporte a nuestro entendimiento...
También nos habla de “dar honor a la mujer”...
Esto implica “honrar” a nuestra esposa... es decir, tratar con respeto, reconocerles “dignidad”... ya que, al igual que nosotros son “coherederas de la gracia de la vida”... Y si Dios las trata en un pie de igualdad respecto del supremo galardón de la vida eterna... ¿Cabe alguna duda acerca de que ello se traslada al resto de las relaciones en el marco del matrimonio?
El apóstol nos indica que el trato que debemos dispensar a las mujeres es similar al de un “vaso frágil”... En este caso hace alusión a la menor fortaleza física de la mujer... y lo delicado de su temperamento... En modo alguno se refiere a cuestiones de tipo espiritual, y aún emocional... ya que frecuentemente observamos hogares en que la mujer es el sostén espiritual de la familia... y su eje emocional... donde la mujer es la que ora... y es amparo y consuelo de todos... incluso del marido... Sin contar la mayor longevidad y probada resistencia femenina a enfermedades y todo tipo de padecimientos... Como dice el psicólogo y pastor Bernardo Stamateas: “... Autoridad
en la familia es el que tiene más revelación, más luz, claridad.
Ese, es el que toma las riendas en un hogar...” Sea hombre o mujer...
Lo que Pedro nos quiere decir es que debemos tratar a la mujer conforme su delicada personalidad... de la misma forma en que tratamos a un frágil vaso de valioso cristal... Como algo muy querido y preciado... Primorosamente... Algo así como lo que Salomón declara a la Sulamita en el Cantar de los Cantares 4:10/11
“... ¡Cuán hermosos son tus amores, hermana mía, esposa mía!
¡Cuán mejores que el vino tus amores, y el olor de tus ungüentos que todas las especies aromáticas!
Como panal de miel destilan tus labios, oh esposa;
Miel y leche hay debajo de tu legua; y el olor de tus vestidos como el olor del Líbano...”
La frase con que cierra el versículo que estamos analizando es de fundamental importancia. Nos advierte que debemos obrar así “para que nuestras oraciones no tengan estorbo”... Pedro visualiza a los esposos orando juntos... Y si ambos están en armonía, sus oraciones se elevarán al Padre sin ningún tipo de obstáculo ni distorsión, porque ambos están orando unánimes... con el mismo ánimo... en el mismo espíritu...
¡Fantástico! Excelente pedagogo... No sólo nos explica qué hacer, sino cómo hacerlo y las ventajas de hacerlo de esa forma...

Así fue, mis amados, que aprendí que “tratar bien” no es equivalente de “honrar” a la esposa... También aprendí que el trato correcto a nuestras mujeres es “a la forma de Dios”... La que Pedro nos enseña... la que Pablo nos describe magistralmente en Efesios 5:28/29 “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia”
Esto es cuando quería compartiros...
Un fraternal saludo.
El Señor haga brillar su rostro sobre vuestras vidas.
Mario